Rutas para disfrutar en Alanís

Ruta de dificultad media-baja, con unos 7 km de distancia y circular.

Punto de partida: Centro interpretación Geoparque. Se toma el Camino de las Navas y a 600m se coge el primer camino de tierra a la derecha (camino de La Gomera), avanzamos por ahí siguiendo siempre todos los desvíos a la derecha. A los 2km del punto de partida encontramos el primer punto de interés “La Turruca”, una antigua construcción de agricultores, única en la zona. Después se continúa la ruta hasta llegar al comienzo del pueblo para tomar el camino que guía hasta la gasolinera. Atravesamos la carretera y nos dirigimos hacia la fuente de La Fontanilla. Desde ahí vamos haciA el cerro del castillo, lo bordeamos y en su base encontraremos una antigua mina de arenisca, de donde se extrajeron las piedras para construcciones como la ermita de San Juan, Iglesia de Ntra. Sra. de las Nieves (se ven bien en ambas puertas de entrada) y otras. Desde ese yacimiento seguimos bordeando el cerro del castillo y volvemos hasta el pueblo.

Comenzamos desde el Paseo de la Alameda del Parral hacia el carril de las Navas pero al ver que durante 2 km., No cambiaba mucho el camino, decidimos volver sobre nuestros pasos y seguir, conforme llegamos a el Paseo de la Alameda del Parral hacia la calle de la Alegría.

Salimos por un camino, dirección a la carretera SE-8001, observando la fábrica de Romero Álvarez S.A. y continuamos unos 300 metros hasta acceder a la izquierda por un sendero, donde dejaremos a la derecha diferentes balsas de alpechín.

Esta ruta si es realizada en primavera también es llamada La ruta de los jarales en flor, miles y miles de arbustos de Jara en flor tapizan el paisaje. Lo mismo jalonan el sendero cómo cubren de blanco todas las colinas que rodean el camino. Una autentica maravilla que hace más llevadera y amena la ruta

Esta ruta la iniciamos en Alanis, en el Parque de la Alameda, y salimos en dirección sur, y a traves de las dehesas, pasamos por delante del Cortijo del Toro, y por las cercanias de la finca de Valdebenito, luego nos dirigimos hacia la cuesta de los Asperones, y posteriormente al paraje de Zarzares, donde pronto nos encontramos con el Arroyo Borbollon, por cuyo curso seguimos hasta llegar cerca de la via del tren, donde nos desviamos algo a la derecha.Seguimos en dirección suroeste, hasta encontrarnos con el Arroyo Castillejo, el cual vadeamos y a continuación, pasamos por delante del Cortijo de la Quinta, iniciando nuestra subida hacia La Cartuja de Cazalla.Pasamos por el Cortijo de El Lagaron, rodeamos por detras La Cartuja, y pasamos por la entrada de la Villa Turistica, actualmente cerrada al publico.

Pasamos por la entrada al recinto de la Cartuja, que dejamos a nuestra izquierda, y seguimos el camino hacia la Carretera de La Estación. Con un pequeño recorrido por esta carretera, entramos en la zona del Centro de Naturaleza El Remolino, y siguiendo el sendero, pasamos Los Recachos, y llegamos a la Población de Cazalla de la Sierra.

La frontera de Granada o la Banda Morisca y el santiaguista Priorato de San Marcos de León conformaron y establecieron la antigua ruta jacobea del Camino de la Frontera. En época bajo-medieval entre las dos Andalucías existía un elemento de separación político y físico: la frontera. Ésta formaba parte del complicado esquema militar y diplomático establecido entre los reinos cristiano de Sevilla y nazarí de Granada, en este sentido, no hay razón para pensar en una situación bélica permanente. Instituciones típicas de la frontera eran los ‘alfaqueques’ y los ‘fieles del rastro’, dedicados al rescate de los cautivos, los primeros, y a la persecución de forajidos, los segundos. Al parecer, ambas corporaciones bajo-medievales custodiaban los caminos entre fortalezas y protegían a los viajeros y caminantes. Al mismo tiempo las órdenes militares de Alcántara, Calatrava y Santiago defendieron estas vías de comunicación y baluartes en las actuales comarcas serranas de Morón, Osuna y Estepa, respectivamente.

Las localidades sevillanas del camino jacobeo de la Frontera están vinculadas al mismo por su pertenencia a la antigua Banda Morisca y por la estrecha relación santiaguista de muchas de ellas, que se constata por la confluencia con el Priorato Leonés de Santiago en la encomienda jacobea de Estepa donde el Camino de la Frontera se convertía también en Camino de Santiago. Al parecer, según las crónicas y leyendas, el apóstol Santiago el Mayor estuvo predicando en Osuna y sus tierras colindantes con anterioridad al año 43. El Camino de la Frontera confluye en Olvera (Cádiz) con la Vía Serrana y en Los Santos de Maimona (Badajoz) con la Vía de la Plata.”

La Geo-Ruta de Siete Caminos parte de la Alameda del Parral, donde se encuentra la oficina de turismo de Alanís. Justo a la salida del pueblo, a mano izquierda, se encuentra la señal de inicio de la Geo-Ruta. Hay que continuar por el camino de Las Navas y, a unos doscientos metros, se encuentra la señal de hito de Valle del Arroyo del Pueblo.

Avanzando, un poco más adelante hay que seguir las señal orientativa y girar a la derecha, se continúa por ese camino, que más adelante gira a la derecha y bordea el Valle del Arroyo del Pueblo. Junto a una edificación singular se ha colocado una señal de hito indicando que se trata de una Turruca, un tipo de construcción utilizada por los pastores y como cuarto de apero. Se continúa hasta las calles del pueblo, donde habrá que girar a la izquierda y continuar hasta la carretera de San Nicolás.

Al llegar a la carretera hay que girar a la derecha y continuar por la vía pecuaria hasta el cruce. En este punto hay que cruzar la carretera, extremen las precauciones, y continuar por el camino. Pronto se verá la señal temática que hace mención a la Cuenca de Alanís – San Nicolás del Puerto a mano izquierda. Hay que continuar dirección al Castillo, pero antes de llegar hay que desviarse por el primer camino que sale a mano izquierda. Pasando los olivos se encuentra un lugar de extracción de piedras de molino y se ha señalizado con una señal de hito. Se continúa bajando para luego girar a la derecha y subir dejando el castillo a mano derecha.

Al final de la cuesta se encuentra otro geositio, las Capas de Campoallá, señalizado con una señal de hito. Ya solo queda bajar hasta el pueblo para comenzar la subida al Castillo de Alanís. Para regresar al punto de partida basta con callejear un poco. Buena Geo-Ruta.

Los primeros kilómetros y los últimos en el pueblo, han sido los más bonitos.
La ampliación que vi necesaria por la cortedad de la ruta, sólo 7 km, al final se me ha hecho un poco pesada ya que transcurre por dos pistas de tierra demasiado llanas y rectas por lo que se hacia el camino monótono.

Viniendo por la A-432 (desde Cazalla), a la entrada del pueblo hay una serie de calles con nombres de provincias andaluzas; aparco, haciendo patria, en la calle Córdoba y desde aquí me dirijo a la contigua calle Manuel Díaz, donde salgo del pueblo, junto al campo de fútbol. Comienzo la subida hacia el primer hito del día, el Cerro del Cura; el camino llega a un tramo hormigonado, donde la pendiente se hace más pronunciada, aunque luego se suaviza, incluso se aplana, antes de llegar al mirador del Cerro del Cura. Lamentablemente la niebla nos impide disfrutar de la vista del pueblo (nos tenemos que conformar con la foto panorámica del panel); el camino (desde Guindales) desciende de nuevo al pueblo, donde podemos ver los tradicionales muros de piedra seca que delimitan los olivares o las tierras para el ganado.

Al llegar a la carretera, se continúa a la derecha hacia la rotonda y luego por una carretera junto a la A-433 (hacia Guadalcanal), que aún tiene algunos tramos asfaltados; tras casi 2 kilómetros por esta carretera, se abandona por otra más interesante a la izquierda, la Cañada Real de Merinas (en la que se ve una flecha amarilla, ya que es el trazado de una ruta de peregrinación jacobea, el Camino de la Frontera, que continúa hacia Guadalcanal). El camino, bordeado por una olmeda, discurre paralelo al arroyo de la Rivera de Benalija (aunque está prácticamente seco) y un corto sendero nos lleva a la Cueva, un ensanchamiento del arroyo que desciende por una ladera con un pequeño lago dentro de una cueva.

Más adelante, el camino se bifurca; continuando por el de la derecha, me acerco entonces al arroyo de El Pueblo, antes de volver al camino que luego enlaza con el que sale a la izquierda y desemboca en la A-432. Continúo hacia la derecha por esta carretera durante unos 700 metros, y luego por un camino a la izquierda (Camino Siete Caminos), que conduce a la ermita de la Virgen de las Angustias, patrona de Alanís. Fue erigida para conmemorar una victoria sobre los “moros” en el cercano valle de Matamoros. Los dos primeros tramos datan del siglo XV y el tercero, y la capilla mayor, del siglo XVIII. El retablo mayor, de estilo gótico, tiene un grupo escultórico de la Piedad, con San Juan y la Magdalena, del siglo XVI, que fue destruido, al igual que la imagen original de la Virgen de las Angustias, también gótica, al inicio de la Guerra Civil.

Ruta sencilla y circular por los alrededores de Alanís.

El recorrido transcurre por diferentes zonas de dehesas, que en épocas de lluvias está muy bonito al estar sumamente verde. Pasamos varias verjas, pero siempre por el sendero señalizado. Por ello en una de las vallas, la señalizada como número 4, pone en su entrada que prohibido el paso, pero son carteles antiguos posteriores a la señalización del sendero por la diputación.
Es apartir de la valla 5 (en sentido horario) cuando el camino se pone más bonito al hacerse un poco más salvaje.

Tras salir se sube hasta el castillo.

El recorrido es sencillo, sin dificultad. Sobre todo sin dificultad técnica ya que todo el rato andas por terreno compactado. Sólo tiene algunas subidas que sin mucho esfuerzo se superarn.

En las dehesas, como es habitual, hay ganado. Lo que vimos nosotros fueron ovejas y cerdos.

Frontera, Priorato Santiaguista y Camino Jacobeo. La frontera de Granada o la Banda Morista y el santiaguista Priorato de San Marcos de León conformaron y establecieron la antigua ruta jacobea del Camino de la Frontera. 

La Sierra Sur sevillana desde época bajo-medieval se definió como una frontera natural perfilada por su propia cadena montañosa y un confín militar de baluartes y torres de vanguardia diseminados por dicha serranía sureña.

Las localidades por las que pasa son Alanís, Alcolea del Río,Algámitas, La Campana, Cazalla de la Sierra, Los Corrales, Écija,Estepa, Guadalcanal, Lora de Estepa, Lora del Río, Martín de la Jara, Pedrera, El Pedroso, Pruna, El Rubio, San Nicolás del Puerto, El Saucejo, Villanueva del Río y Minas, Villanueva de San Juan y Cañada Rosal.

Tiene una dificultad media y son 262 km.